La bióloga de la Universidad de la Habana y miembro del equipo de investigación del área medio ambiente del Centro de Desarrollo Local y Comunitario del Ministerio de Ciencia, tecnología y Medio Ambiente de Cuba, Diana Enríquez, ha fortalecido su capacidad investigativa y conocido nuevos aportes de la mano de expertos que le ayudarán en su tarea de definir las pautas para una mejor y eficiente gestión de los residuales líquidos en los municipios cubanos.

En Cuba, el agua ha sido reconocida como un asunto estratégico y de seguridad nacional, y se ha convertido en elemento esencial de las actuales políticas ambientales y económicas, así como un factor clave del desarrollo social.

Lograr que los cuerpos de agua superficiales y subterráneos del país recuperen su salud, aporten caudales para satisfacer las necesidades y contribuyan al crecimiento económico y calidad de vida de la población; requiere que se mantengan limpios, sin descargas de aguas residuales urbanas, industriales y agrícolas que los contaminen y afecten más allá de su capacidad natural de asimilación.

En la imagen, Diana junto a la Tesorera de la UIM Leonor Rodríguez durante la entrega del certificado que acredita su estancia investigativa en nuestra institución