Queridas amigas y amigos...

Con la emoción del reencuentro y la satisfacción de volver a pisar suelo mexicano, quiero darles las gracias a todos ustedes por su recibimiento y felicitarles por la organización de este importante encuentro, destinado a impulsar un factor tan determinante para la convivencia como la Igualdad o Equidad de Género.

Traigo hoy a esta Cumbre de Aguascalientes el saludo y el recuerdo de nuestros recientes encuentro en Granada y Almería, en España, ciudad en la que como Alcalde, tuve el honor de recibirles hace pocos meses y desde la que hemos seguido con atención y preocupación las noticias referidas a los últimos acontecimientos climatológicos acaecidos en México.

Una vez más, la Unión Iberoamericana de Municipalistas se abre, generosa y fértil, en un abrazo que engloba ambos lados del Atlántico y nos reúne en torno a las orillas del interés común de mejorar la calidad de vida y de la democracia de los pueblos que formamos la Comunidad Iberoamericana.

Para mí y para mis compañeros me acompañan desde España es un placer y un honor participar con todos ustedes en esta reunión, y en este acto inaugural. Queremos dar las gracias y felicitar de antemano a todos los organizadores y participantes por su trabajo, y por este nuevo y decisivo esfuerzo.

Por ello, a cuantos, como nosotros, han venido desde tantos países de la Comunidad Iberoamericana les doy como Presidente de la Unión Iberoamericana de Municipalistas, la más cordial y afectuosa bienvenida a Aguascalientes, que de la mano de su Ayuntamiento, y de su alcaldesa, Lorena Martínez Rodríguez, se ha volcado en preparar un marco inmejorable para el desarrollo de esta Cumbre.

Señoras y señores: el compromiso por la erradicación de la lacra que supone la desigualdad entre hombres y mujeres es un deber ineludible de esta unión de municipalistas.

Este convencido de que el porvenir de nuestros países depende de la capacidad que tengamos de situarnos en la vanguardia de los cambios y avances necesarios.

Y aunque no conozcamos totalmente los contornos del nuevo horizonte al que nos asomamos, sí sabemos que nos dirigimos hacia un orden social y económico absolutamente nuevo en el que la creación de una conciencia común sobre la Igualdad de Género va a ser un factor clave para generar crecimiento y bienestar.

De hecho, los proyectos y experiencias compartidas en esta materia y que van a ser objeto de este encuentro, se están mostrando cada vez más decisivos.

Para ello, en esta II Cumbre contaremos con la presencia de prestigiosas autoridades académicas, de la investigación y del movimiento feminista, de reconocida trayectoria en el estudio y la lucha por la igualdad de género.

Esta reunión debe servir, además, para manifestar nuestro apoyo al deseable objetivo de que en la Comunidad Iberoamericana no existan diferencias de trato, de salario o de rol familiar entre mujeres y hombres, y también para reflexionar sobre las metas que nos quedan por alcanzar en este camino.

Con los resultados y conclusiones de esta Cumbre, pondremos en marcha la Red Iberoamericana y Mexicana de Municipios por la Igualdad de Género, que debe contribuir a acercar a los ciudadanos las políticas diarias de gestión y actuación tendente a difundir y extender los valores propios de la igualdad entre hombres y mujeres.

Estas redes serán herramientas de diálogo, de construcción mutua y del intercambio de experiencias y conocimientos que, sin duda, permitirán a los gobiernos locales formalizar su voluntad a favor de la igualdad entre géneros como condición indispensable del desarrollo y, por tanto, de la democracia.

En este sentido, debemos ser conscientes de que identificar y promover nuevos métodos de implantación de la Igualdad de Género, reforzará la presencia y la competencia de nuestra comunidad en la escena internacional.

Y aunque es cierto que esta lucha por la Igualdad es hoy un objetivo global, no podemos pasar por alto el empuje y la fuerza que supone impulsar este criterio a través de nuestro inmenso y rico espacio cultural común, de alcance y proyección universal, puesto que está compuesto por una treintena de países de todos los continentes y más de setecientos millones de personas que hablamos español y portugués.

Señoras y señores: promover la construcción de nuevos modelos de ciudad, desde una visión de justicia y equidad de género constituyen hoy una premisa irrenunciable para el desarrollo local.

Por eso estamos hoy reunidos en Aguascalientes: para continuar consolidando espacios para el diálogo, e intercambio de conocimientos y de experiencias comunes, a fin de fomentar la incorporación de la visión o del enfoque de género en las agendas públicas locales, avanzando en nuestro ineludible compromiso político con la igualdad o equidad de género.

Asumiendo el consensos de la I Cumbre de Género celebrado en 2011 en la ciudad de Córdoba, Argentina, debemos seguir fortaleciendo nuestra la capacidad de diálogo, y alentar la negociación entre los gobiernos locales, la sociedad civil y otros agentes relevantes para incluir e instalar en nuestras agendas movimientos y acciones sensibles con la Igualdad de Género.

Esta Cumbre, además, será el marco en el que suscribamos la Declaración de Aguascalientes: “Repensando las ciudades desde los derechos de las mujeres”, que permitirá consensuar los anhelos del municipalismo desde la perspectiva del género.

FINALMENTE, quiero decir a todos los asistentes a esta Cumbre, que su presencia y participación en ella es una prueba de su compromiso con la Igualdad de Género que valoramos profundamente.

Estamos seguros de que estas jornadas serán un gran éxito y de que todos los participantes volverán a sus lugares de trabajo y de residencia con la satisfacción de haber vivido una experiencia útil y enriquecedora. Nuestro agradecimiento a la ciudad de Aguascalientes, a sus instituciones, y a cuantos desde los diferentes ámbitos de administración y organización, han aportado el mejor de sus esfuerzos para el éxito de esta Cumbre.

Muchas gracias